Salimos por la carretera antigua que comunicaba Betanzos con Melide y paramos en Roibeira para ver el precioso entorno del río Mendo. Aquí se podemos ver el puente medieval(**), un magnífica estampa.
Continuamos hasta Cins (Oza dos Ríos) para ver su iglesia parroquial de San Nicolás (***). Tuvimos la suerte de encontrarla abierta. Muy bien restaurada y con restos de pinturas murales. Los tímpanos de sus puertas son los elementos arquitectónicos más conocidos. Nos evocan los últimos coletazos del Románico. Llegamos a la feria de Melide a las 12,45. Último domingo de mes, feria de ganado. Comida en la localidad. En el museo nos facilitan información que vamos a aprovechar por la tarde. Primero, la visita a la iglesia románica de Santa María de Melide. Sólo pudimos visitarla por fuera porque la señora que tiene la llave no se encontraba en casa. Muy buena pinta y queda pendiente para una próxima visita.
Nos acercamos a Moldes para ver su iglesia(*). Curiosamente encerrada entre las casas de este pequeño lugar. Tiene unos tímpanos curiosos con bajorrelives bastante gastaditos por el paso del tiempo. También descubrimos en sus paredes algunas piedras talladas y reutilizadas de anteriores u otras construcciones.
Y después fuimos a Toques y desde allí subir al castro de A Graña (**). Es un pequeño castro con una parte excavada. De vuelta a casa, al pasar por Oza dos Ríos, nos acercamos a la iglesia de Santo Tomé de Salto. No hay mucho que mencionar, salvo su solitario entorno. Regresamos a casa a las 18:30.
